
Los científicos llevaban años advirtiendo de que los problemas medioambientales, consecuencia de la acción del ser humano, ponen en peligro tanto la salud del planeta como la nuestra. El coronavirus ha puesto en evidencia que no somos invulnerables a dichas amenazas y su impacto no puede hacernos olvidar el gran reto para la humanidad: la lucha contra el cambio climático. Organismos como la Unión Europea (UE), el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial (BM) ya se han posicionado a favor de la Recuperación Verde para superar esta crisis sanitaria, económica y social siguiendo la senda marcada por la Agenda 2030 en busca de un mundo más sostenible.
QUÉ ES LA AGENDA 2030 Y CÓMO SURGE
El 25 de septiembre de 2015, los 193 Estados miembros de la ONU aprobaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, un ambicioso plan que busca alcanzar una prosperidad respetuosa con el planeta y sus habitantes. Dicha Agenda está compuesta por 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), divididos a su vez en 169 metas, a cumplir en 2030 con la intención de "no dejar a nadie atrás". La amenaza del cambio climático es ahora más real que nunca y los ODS son cruciales para no comprometer el futuro de los más jóvenes.
La Agenda 2030 es una continuación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (2000-2015) de la ONU, los cuales fueron en su día la primera confluencia internacional para afrontar problemas globales como la erradicación de la pobreza extrema y el hambre o la mejora en el acceso a la educación. Aunque las metas no se cumplieron totalmente, sí favorecieron importantes avances que, en 2015, se extendieron a través de la Agenda 2030 y sus respectivos ODS.